28 de septiembre de 2016

Ring (Koji Suzuki)


"The Ring" o "Ring" a secas, estamos ante un clásico del terror japonés. Creo que hablo por la mayoría cuando digo que es más conocida la película que el libro. Mis recuerdos del film son difusos, pero hay algo que me quedó grabado en lo más profundo de mi subconsciente: La escena de la chica saliendo del pozo, con esa mezcla de luces estroboscópicas y fundidos en negro que provocaban en el espectador miedo y dolor de cabeza a partes iguales. Algún resorte debió saltar en mí, porque desde entonces cuando veo escenas de películas de terror que usan y abusan de este efecto el caso es que no lo soporto, y suelo taparme los ojos, no por miedo, claro, sino para evitar posteriores jaquecas y migrañas.

Con estas paranoias en la cabeza comencé la lectura de "Ring", por suerte la literatura no defrauda, y supera con creces a la película, sobretodo porque en el libro el autor expone una serie de argumentos y detalles de los hechos que en la película se saltan a la torera. Son muchas las diferencias entre novela y film, sin ir más lejos la famosa escena de la chica del pozo no existe en el libro.

Cuatro jóvenes mueren de forma repentina sin explicación alguna, un periodista sorprendido por los hechos comienza a investigar la relación entre las muertes, y su búsqueda confirma que los cuatro chicos visionaron la misma cinta de vídeo, en ella se muestran imágenes extrañas y abstractas, y la filmación termina con la sentencia a muerte en el plazo de una semana de la persona que visionó la cinta, a menos que se ejecute una especie de conjuro o sortilegio que se indica al final de la cinta, pero que por desgracia alguien ha borrado.

El periodista, su mejor amigo, su mujer y su hija ven la cinta de vídeo, y por tanto, tendrán una semana de plazo para averiguar como detener la maldición. Su investigación les llevará a conocer la trágica historia de una chica llamada Sadako (la del pozo), una mujer hermosa y hermafrodita con una serie de poderes psíquicos capaz de elaborar un maléfico plan incluso después de su muerte.

Tal y como comenta uno de los protagonistas:
"En cada época, el Diablo reaparece bajo un disfraz distinto. Puedes pisotearlo una y otra vez, pero nunca dejará de venir."

Hasta ahora las lecturas de autores japoneses resultan fáciles de digerir, un estilo muy directo unido a cierta cotidianidad narrativa, salpicado con ese trasfondo cultural de la mitología ancestral japonesa, constituyen un seguro de calidad y una garantía de pasar un rato agradable.

Por destacar algo de K.Suzuki, me parece que es de agradecer el esfuerzo por intentar explicar los orígenes de los aspectos sobrenaturales de su novela, algo que ni siquiera se nombra de pasada en la película. En definitiva, si has visto la película lee el libro, merece la pena y tienen poco en común; y si no la has visto perfecto, no estarás condicionado por la chica que trepa por el pozo.

Nota: 8/10

2 comentarios:

Jose Manuel dijo...

Me has convencido, voy a ponerme con el libro.

Jose Manuel dijo...

Me gustó muchísimo, produce miedo. Me entró ganas de leer más terror japonés.