29 de junio de 2016

Revival (Stephen King)


"Revival", novela de 2014 del maestro del género Stephen King, es el fruto cosechado por el autor tras una idea que rondaba por su cabeza desde su tierna infancia. Según el propio escritor, la novela se alimenta y enriquece de dos libros clásicos de nuestro género preferido: "El gran Dios Pan" de Arthur Machen, y "Frankenstein" de Mary Shelley, ambos comentados en este blog.

La trama discurre en un entorno muy conocido por King, Maine (Nueva Inglaterra) en los años sesenta, allí Jamie, un niño, entabla amistad con Charles Jacobs, el nuevo reverendo del pueblo y gran aficionado a experimentar con la electricidad de forma poco convencional.

Tras un fuerte golpe, el hermano mayor de Jamie pierde la voz, y Jacobs lo sana de forma milagrosa utilizando sus aparatos eléctricos. Días más tarde, la mujer e hijo de Jacobs pierden la vida en un accidente de tráfico, el pastor cae en una profunda depresión, pierde su fe en Dios, y tras un controvertido discurso pierde también su puesto de reverendo en el pueblo.

Décadas después, las vidas de Jamie y Jacobs vuelven a cruzarse, Jamie está enganchado a las drogas y Jacobs vuelve a obrar otro de sus milagros "eléctricos" y consigue sanarlo. A partir de entonces, Jamie le está eternamente agradecido y está dispuesto a hacer cualquier cosa por el reverendo. Sin embargo Jamie duda cuando Jacobs le propone colaborar con él en un último gran experimento eléctrico, un invento con el que Jacobs pretende comunicarse con el más allá.

King lo vuelve a hacer, no conozco otro autor que modele a sus personajes con semejante precisión, y haga recaer el mayor peso de la novela sobre ellos. En "Revival", el reverendo Jacobs juega el papel del Doctor Frankenstein con sus experimentos eléctricos que resultan ser milagrosos aunque tengan desagradables efectos secundarios.

Una lectura que engancha al lector desde la primera página y mantiene la intriga hasta el final, con influencias Manchenianas referentes a esa realidad velada que no somos capaces de ver, pero podemos intuir con algún sexto sentido que ha quedado atrofiado y que de vez en cuando nos hace ver cosas más allá de la realidad.

El problema es que hay puertas que es mejor no abrir.

Nota: 9/10

23 de junio de 2016

La habitación del dragón volador (Joseph Sheridan Le Fanu)


1872 fue un año clave para el escritor irlandés Joseph Sheridan Le Fanu, dos de sus obras más conocidas, y que han aguantado con dignidad el paso del tiempo son "Carmilla" y "La habitación del dragón volador", dos clásicos de la literatura gótica tardía cosechados ese año. 

Ese dato no tendría más importancia, sino fuera porque Le Fanu murió un año más tarde (1873) recluido en su hogar, alejado de la sociedad, y con todos los síntomas de sufrir una fuerte depresión a causa de la muerte de su esposa. En esa época se ganó el mote de "Principe Invisible" por su reclusión, y cuenta su biografía que escribía sus relatos acosado por poderes malignos del más allá. Según su teoría cuando el espíritu de la persona es débil se abre una puerta en el inconsciente por donde se puede percibir la esencia del mal.

"La habitación del dragón volador", también traducido al castellano como "La posada del dragón volador" se aparta un poco del ambiente sobrenatural de la novela gótica típica, y entra de lleno en uno de los terrores más pavorosos que ha angustiado al hombre desde siempre: Ser enterrado vivo.

El relato se ambienta tras las guerras Napoleónicas, un periodo de tiempo donde los Británicos envalentonados con sus victorias se dedicaban a pasear por los territorios vencidos. En este caso, un joven inglés aristócrata viaja a Francia en busca de nuevas emociones, allí conoce de forma casual a una bella dama de la cual queda prendado. Varios personajes se cruzan en su camino y le ayudan a conocer a la misteriosa dama en un baile de disfraces en París.

El ingenuo inglés se aloja en la posada el dragón volador, una hospedería con una larga historia de desapariciones y leyendas sobrenaturales. Allí es citado por la dama, que muestra interés en él, a pesar de ser una mujer casada. Una trama conspiranoica se cierne sobre el joven, ¿ Será capaz de sobrevivir a ella ? 

Recuerdo haber leído este relato en 1983 editado por Forum en la célebre biblioteca del terror (las de tapa negra), entonces era un adolescente, y he de reconocer que transcurridos más de treinta años no recordaba absolutamente nada de la historia. Está claro que el relato no me caló; no así como la colección entera, sin la cual hoy en día es posible que este blog no existiera.

Nota: 6,5/10

20 de junio de 2016

Feed (Mira Grant)


Bajo el seudónimo de Mira Grant se esconde la escritora Californiana Seanan McGuire, una autora movida por dos pasiones: Las películas de terror, y el estudio de virus. Fruto de esta extraña mezcla de aficiones nace en 2010 "Feed", el primer libro de la trilogía Newflesh.

Ya comenté en otra entrada que el impulso inicial que nos lleva a elegir un libro para su lectura suele ser el resumen de la contraportada, si allí, en esa condensación de escogidas palabras, el autor y la editorial son capaces de captar la atención del lector, la compra (acto impulsivo donde los halla) tiene visos de llegar a buen puerto.

Cuantas veces nos hemos dejado embaucar por una contraportada prometedora, y una vez metidos en harina, vemos con cara de pasmo, que aquello no era lo que el lector había imaginado. Eso es lo que sucede con Feed, que nos plantea los ingredientes de un apocalipsis zombie en una sociedad futura donde la información es poder, y donde los blogueros freelance son los que cortan el bacalao.

Visto así, tiene buena pinta, es una pena que se quede sólo en una declaración de intenciones, donde la acción zombie brilla por su ausencia, y sus diez horas de explicaciones detalladas del mundo imaginario futurista se hacen interminables.

Nos ponemos en situación, año 2040, un virus campa a sus anchas por todo el mundo, la gente infectada se convierte en zombies y la gente sin infectar lucha por esterilizar sus ciudades y erradicar cualquier brote entre la población, para ello sus habitantes tienen una reducida movilidad, y aquellos que se aventuran fuera de las zonas seguras han de pasar unos controles de seguridad y análisis de sangre constantes (cansinos sería más adecuado decir).

Una bloguera de actualidad y su hermano comparten un blog de noticias muy popular, tanto que un senador de los EEUU contacta con ellos para publicitar su campaña presidencial. Al comenzar a trabajar para él empiezan a suceder extraños actos de sabotaje y muertes inesperadas, esto hace sospechar a los hermanos que alguien del entorno del senador está traicionándole. Georgia (la bloguera) descubre quien es ese traidor, aunque quizá sea un poco tarde.

Es más probable que "Feed" acabe gustando más al lector de ciencia ficción que al lector de terror, el mundo post-apocalíptico dibujado por la autora es lo mejor del libro, los personajes son planos (con la honrosa excepción de Georgia), una pena que con estos mimbres Grant no halla sido capaz de insuflar algo más de acción a la trama, que además de ser repetitiva, se alarga de forma artificial sin aportar nada a la historia.

¿ Quién se atreve con la segunda y tercera parte de la trilogía ?, yo no, desde luego.

Nota: 3/10

10 de junio de 2016

La gente blanca (Arthur Machen)


He de reconocer que Arthur Machen es uno de los autores más crípticos que he tenido la oportunidad de leer, sus historias están cargadas de simbolismo y plagadas de pequeños guiños de leyendas mitológicas. Con sinceridad, creo que el lector que se enfrente por primera vez a la obra de Machen puede quedar algo defraudado, los relatos pueden parecer simples y carentes de ese gancho que hace que lector no pueda dejar de leer; sin embargo, aquel que sepa lo que busca entre las líneas de su obra, irá encontrando pequeños secretos y referencias que a buen seguro hará de su lectura una experiencia más placentera.

"La gente blanca", publicado en 1899, nos presenta a bocajarro a dos individuos que divagan sobre el bien y el mal, la magia, y las experiencias sobrenaturales, uno de ellos postula la existencia de una realidad velada de la que el ser humano ha ido alejándose poco a poco:

"Y permítame decirle esto: nuestros sentidos más elevados están tan embotados, estamos tan empapados de materialismo, que difícilmente reconoceríamos la verdadera perversidad si nos topáramos con ella."
(Cita de La gente blanca de Arthur Machen)

Para demostrar su teoría muestra un manuscrito "El libro verde" que contiene el diario de una niña que narra las historias que su ama de cría le contaba de pequeña, extrañas leyendas que tienen que ver con un mundo mágico oculto, un inquietante universo de hadas, ninfas, duendes, y seres blancos que habitan en lo más recóndito de los bosques.

Ojo al dato, algunos críticos (británicos of course) consideran esta pieza literaria como el relato de terror mejor escrito de todos los tiempos, casi nada, a mi juicio una muestra más de la prepotencia de la pérfida Albión, muy dada a alabar todo lo suyo y denigrar todo lo que se genera fuera de sus islas.

No soy un experto en Machen, a pesar de ello me voy a mojar y dar mi opinión aún a riesgo de parecer un "cuñao" indocumentado, o peor todavía, un tertuliano más de sálvame de luxe. La percepción que tengo de Machen es que sus relatos reflejan una gran espiritualidad y un pensamiento reflexivo continuo sobre el bien y el mal, quizá fruto de pasar su niñez junto a su padre Vicario de la iglesia anglicana de Gales.

Machen no escribió sobre fantasmas, sino sobre la verdad oculta tras las leyendas del folklore que se pierden en la noche de los tiempos, ritos ancestrales y cuentos de hadas, influenciado por sus propios sueños, las creencias de la Orden "Golden Down" a la que pertenecía, el mundo Celta donde se crió, y una cultivada erudición sobre mitología universal.

Todo este batiburrillo de variables hace que el lector medio quede fuera de juego y pueda llegar a ver las obras de Machen como una literatura infantiloide, más cercana a "Alicia en el País de las maravillas" que a los relatos más típicos de terror; aunque por otra parte los expertos en "Alicia" conocen su enorme carga simbólica, fantástica, y psicológica, que siglo y medio después aún sigue dando que hablar.

Nota: 6,5/10

9 de junio de 2016

La casa infernal (Richard Matheson)


Reconozco que abrir un libro de Matheson siempre me genera unas altas expectativas, quizá influenciado por el recuerdo de su obra "Soy Leyenda". El problema de esperar mucho de algo o de alguien, es que es fácil que te defraude o no llegue al nivel de lo que el lector espera, y eso es precisamente lo que sucede con "La casa infernal", novela de 1971, un tanto encasillada en las tendencias y modas paranormales de esa década.

La historia comienza cuando un viejo y excéntrico millonario, que presiente su cercana muerte, ofrece a un selecto grupo de personas una cuantiosa cantidad de dinero por descubrir si existe algo después de la muerte. Para ello los invita a experimentar en el lugar donde más fenómenos paranormales se han producido, conocida como la casa infernal, un lugar cargado de malas vibraciones donde extraños fenómenos y muertes suceden si parar.

El grupo elegido está formado por un escéptico científico y su mujer, un antiguo parapsicólogo que fue el único superviviente de una visita a la casa treinta años atrás, y una medium capaz de interaccionar con los espíritus. 

Ya dentro de la casa, comienzan a suceder cosas extrañas, a través de la medium el mal concentrado aflora, pero el científico siempre intenta encontrar una solución racional a todos los hechos, poco a poco los acontecimientos se aceleran y las energías negativas de la casa ponen a cada uno en su sitio.

"En toda la historia de las casas encantadas, es la primera vez que existe algo similar: una única entidad tan poderosa que puede crear lo que parece un encantamiento múltiple y complejo. Una entidad que es capaz de parecer docenas de ellas y de imponer infinitos efectos físicos y mentales sobre aquellos que entran en la casa... usando su poder como si tuviera a su disposición un cuadro de mandos gigantesco, infernal."
(Cita de "La casa infernal" de Richard Matheson)

La sensación después de la lectura es la de haber leído un estereotipo de novela acotada dentro del pensamiento reinante en los años 70, época donde nuevos fenómenos paranormales salían de debajo de las piedras tal y como refleja Matheson en la siguiente lista de males que afectan a la casa:

Adivinación; Adivinación por bola de cristal; Admonición; Apariciones; Aportes; Asportes; Atado de nudos; Automatismo motor; Automatismo sensorial; Autoscopia; Bilocación; Brisas; Catalepsia; Clariaudiencia; Clariconciencia; Clariconciencia floral; Clarividencia; Comunicación; Comunicación onírica; Control; Desmaterialización; Dibujo automático; Dibujo directo; Ectoplasma; Eidolones; Elongación; Emanaciones; Escotografía; Escriptografía; Escritura automática; Escritura dérmica; Escritura directa; Escritura facsímil; Escritura sobre pizarra; Estigmas; Exteriorización de motricidad; Exteriorización de sensación; Extras; Fantasmas; Fantasmogénesis; Fenómenos biológicos; Fenómenos eléctricos; Fenómenos luminosos; Fenómenos magnéticos; Fenómenos poltergeist; Fenómenos químicos; Fotografía psíquica; Glosolalia; Golpes; Habla automática; Hiperestesia; Hipermnesia; Huellas; Ideomorfos; Ideoplasma; Impresiones químicas; Interpenetración de la materia; Levitación; Materia a través de materia; Materialización; Metagrafología; Moldes de parafina; Música trascendental; Obsesión; Olores; Paramnesia; Paraquinesia; Parestesia; Percepción extra-temporal; Percusión; Personificación; Pintura automática; Pintura directa; Posesión; Precognición; Presentimiento; Previsión; Profecías oníricas; Pruebas con libros; Pruebas impresas; Psícometría; Psicoquinesia; Radiestesia; Radiografías; Retrocognición; Salpicaduras de agua; Seudópodos; Sonambulismo; Sonidos psíquicos; Sueños; Teleplasma; Telequinesia; Telestesía; Tiptología; Roces psíquicos; Transfiguración; Transporte; Varas psíquicas; Vientos psíquicos; Visión ciega; Visión telescópica; Voces; Voz directa; Voz independiente; Xenoglosia.
(Cita de "La casa infernal" de Richard Matheson)

Buen intento, pero en detrimento del autor; y me duele decirlo, los personajes están demasiado encasillados en sus roles, y se percibe un exceso de sexo reprimido en las mujeres, quizá reflejo de las tendencias de la época. Matheson describe el horror de forma explícita y obvia, y ese es precisamente uno de los puntos débiles de la novela; el terror no se debe explicar de forma directa, sino pierde su esencia.

Nota: 6/10

3 de junio de 2016

Turno de noche (Ramsey Campbell)


Una de cal y otra de arena, ese el concepto que de momento tengo en este blog de Ramsey Campbell, Me pareció horrible el primer libro suyo que tuve oportunidad de leer "Los sin nombre", después su percepción como escritor mejoró con "Influencia", y ahora, "Turno de noche" vuelve a decepcionar. Campbell está considerado un autor de bestsellers, consagrado como referente en el género de terror, y capaz de rivalizar con el propio King, pero una cosa te digo Campbell: Se te están acabando los cartuchos en este blog, tardaré bastante tiempo en volver a darte otra oportunidad.

Al grano, la historia de "Turno de noche" se ambienta en una flamante tienda de libros situada en un centro comercial de la campiña inglesa, una zona despoblada, a la que sólo se puede llegar por autopista, y donde parece haberse instalado una densa niebla perenne.

En la tienda trabaja un batallón de personas, tantas que aquello parece el camarote de los hermanos Marx en temporada alta. Eso, que no debería ser el centro de atención del lector, pero al autor le parece que sí, y dedica más de trescientas páginas a describir las personas que trabajan en la librería. Apunta: Woody, Jill, Madeleine, Nigel, Agnes, Wilf, Jake, Ross, Ray, Connie, Angus, Greg, Gavin, Lorraine. ¿ Te importan los nombres ?, No, a mi tampoco. 

Después de una larguísima y tediosa introducción capaz de aburrir al lector más entusiasta, el foco de la acción se centra en que todos los trabajadores tienen que cubrir un turno de noche. De la forma más absurda, esa noche comienzan a suceder hechos extraños que van a precipitar el final de una manera tan insulsa que parece mas bien un insulto a la inteligencia del lector.

Si yo fuera profesor de escritura, recomendaría a mis alumnos leer este libro para que vieran todo aquello que no funciona en una novela: Personajes planos (ultraplanos sería más correcto) que no aportan nada a la trama, y lo peor de todo, que no se distinguen unos de otros. Acción escasa (nula sería más correcto), el lector está esperando que pase algo con sentido, y sólo lo consigue cuando consigue leer "FIN". Trama poco comprensible (absurda sería más correcto), el lector no es capaz de discernir que está pasando, por qué de repente hay un persona hundida hasta el cuello de barro en medio del camino, o por qué entra agua dentro de un montacargas sin ninguna razón. Ambientación monótona, ya sabemos que hay niebla, mucha niebla, niebla a mogollón, pero oye, que eso por sí sólo no asusta, sino que se lo digan a los de Lleida.

Simplificando, el género de terror aguanta muchas cosas, pero no vale todo, el lector exige un mínimo de coherencia; lamentablemente, en "Turno de noche" no la hay.

Nota: 2/10